jueves, octubre 23, 2008

Justicia denigrada, Democracia en peligro...

Este jueves cientos de magistrados, jueces, abogados penalistas y personal penitenciario se reunieron frente al Palacio de Justicia para manifestarse contra Rachida Dati, que desde su llegada a la cabeza del Ministerio de Justicia francés es cada vez más repudiada. Se le reprocha la total incongruencia de su política de procuración y administración de la justicia.

Magistrados y jueces trabajan con recursos y oficinas claramente insuficientes, lo cual va en contrasentido con la política tout-sécurité de penas mínimas que los obligan a condenar a prisión, con muy poco margen de maniobra, a cada vez más procesados; todo esto dentro de un contexto de cárceles sobrepobladas y en condiciones deplorables. 

Los jueces, en lugar de dedicar su tiempo a examinar los problemas locales para utilizar el mejor criterio en cada caso, son obligados a labores administrativas tan pesadas como inapelables. Como resultado, los procesos se vuelven lentos y enredados, los detenidos son tratados sin dignidad, los suicidios y torturas en las prisiones se hacen frecuentes.

La comunicación que todo el aparato de justicia tiene con Madame Dati es pésima y no hay ninguna disposición para que esto mejore. La justicia francesa desde la llegada de Nicolás Sarkozy pasa por uno de sus peores momentos.