Legislativas francesas

El 10 y 17 de junio los legisladores franceses serán expuestos al voto popular. El UMP(Unión por un Movimiento Popular), partido creado por Chirac en 2002, es favorito para obtener la mayoría deseada por el nuevo presidente para realizar las reformas que prometió durante su campaña. Su principal argumento es su deseo de gobernar sin freno alguno. El poder legislativo podría efectivamente constituir un obstáculo si los partidos de oposición consiguieran una mayoría en la Asamblea Nacional.
Los partidos de centro, de reciente creación, podrían ser de gran utilidad para un nuevo congreso plural. No obstante, estos últimos no podrán conseguir representaciones en la Asamblea puesto que el sistema de elección francés de los miembros del poder legislativo no es proporcional al peso de cada partido en un sufragio universal. Por ejemplo, el partido de extrema derecha de LePen, el FN (Frente Nacional), obtuvo 10% de los votos en la elección presidencial -la mitad menos que en 2002 puesto que los electores de este partido fueron atraidos por el discurso del presidente actual -, y sin embargo es muy posible que el FN no consiga ningún dipútado en las próximas legislativas, como ya era el caso en las elecciones precedentes.
La división de poderes implica un equilibrio en el gobierno, es decir, que el poder ejecutivo no concentre un poder excesivo libre de debate. Si el partido del presidente obtiene la mayoría en el congreso, el debate no será necesario puesto que la fidelidad de los diputados del UMP al nuevo presidente se traducirá en una ausencia de discusiones de fondo en los nuevos proyectos de ley.